SAVOIR-FAIRE Collected, Vol. 4, segunda parte
Morgan King y Neil Ferrier
5 min
The Edge Neil, usted es un genio del diseño. ¿Tiene alguna definición propia sobre lo que debe ser el buen diseño, especialmente en el campo de la relojería?
Neil Tengo un par de ideas. Creo que una de las cosas que más me atrajo de los Heuer vintage más allá de la conexión familiar y lo que ha hecho que siga coleccionándolos en lugar de coleccionar otra cosa (tengo varios Rolex vintage, algunos Omega vintage, todos ellos con cronógrafo, soy un amante de los coches y un forofo del automovilismo, etc.) es la fantástica labor que Heuer ha hecho en el terreno del color. Si observamos un Rolex GMT convencional, no encontraremos color; el amarillo de las manecillas, colores de esfera que rozan los grises, azules… En lo que se refiere al color, Heuer tiene un historia prodigiosa de la que nadie habla. Es alucinante. Uno de los detalles simples que hará que prefiera un diseño u otro es el color. La actitud traviesa es intrínseca a Discommon y el color es un indicio de travesura.
Para mí, hay otros elementos importantes en el diseño relojero. A menudo, son los elementos que faltan. Somos una firma de diseño industrial, por lo que realizamos obras increíblemente únicas, pero nos ganamos el pan haciendo grandes proyectos para compañías farmacéuticas o automovilísticas, y funcionamos a través de líneas, estructuras de líneas y flujos de líneas. Una de las cosas que más me atrajo del Autavia fue la línea lateral arqueada de la caja y la forma biselada del borde pulido. En los años 1960, cuando esa forma se realizó por primera vez, los procedimientos para dar con ella eran complejos.
Diría que una de mis principales críticas a la relojería de hoy en día es la falta de interés o de atención por la forma de la caja. Por ejemplo, si observamos un Lange 1 o un F.P. Journe o algún otro modelo similar, vemos que las cajas son simples círculos con cuatro brazos, lo que me parece triste porque esa parte da mucho juego. El simple hecho de que algo esté hecho de titanio, de oro blanco o rosa o de lo que sea es suficiente para algunos. Sin embargo, para mí y mis empleados, para nuestras almas, es un campo que da mucho juego y que no recibe la atención que se merece. Además, el equilibrio del color es un verdadero reto. Cuando tienes muchos niveles (un segundero, una subesfera, un bisel fijo) puedes liarla mucho o dar en el clavo con el equilibrio perfecto. A lo largo de su historia, TAG ha tenido momentos estelares en lo que se refiere a encontrar el mejor equilibrio cromático.
The Edge ¡Qué bien lo ha definido! Como ambos sienten este especial apego por el contraste de colores, le hago a Morgan la misma pregunta. ¿Puede decirnos algo sobre ello teniendo en mente su colección?
Morgan King's collection - Heuer Monaco 74033N "Dark Lord"
Morgan En primer lugar, Neil ha hablado desde una perspectiva joven e imaginativa. Muchos de los relojes de tipo aristocrático eran estupendos, pero están hechos para conservadores, gente que quizás haya dejado de ser creativa desde hace mucho tiempo. No hay nada malo en ellos, porque todos tenemos nuestras etapas conservadoras. Siempre se necesita tener un traje de etiqueta para ir a algún lugar. Pero en el armario de Neil o el mío, también hay un traje de topos con pañuelo rojo. Cuando se ven las cosas desde esta perspectiva, es apasionante, es un juego de mentes jóvenes. Si pensamos en el automovilismo y en Heuer durante los años 1950, 1960 y 1970, vemos que todo era bonito y exuberante, como los pavos reales. En el ambiente reinaba mucho orgullo y machismo, pero también mucha creatividad. Por ejemplo, cuando salió el “Dark Lord” 74033, Jack Heuer pensó: “¿y si lo ponemos en algo negro y lo hacemos de PVD? ¡Vamos a probar!”. Y eso marcó el inicio de una época totalmente nueva.
Incluso si observamos el azul del Monaco, vemos que es extremadamente distinto. Todos copiaron el Monaco cuando se lanzó ese azul, si lo pensamos bien. Primero, fue un tono azul más bien soso, pero luego se le añadió un brillo metálico, como las reverberaciones del mar. Si pensamos en Delaney (el personaje encarnado por McQueen en “Le Mans”), vemos que lleva un mono blanco con vistosos detalles rojos, que lleva el pelo rubio, con los ojos azules… En realidad, si lo pensamos bien, parece un reloj Heuer andante. En suma, TAG Heuer sabe muy bien cómo jugar con los colores. Incluso el estuche Heuer vintage rojo con cuadros blancos y negros es genial. Es diseño “pop art”; nunca pasará de moda. Colecciono estuches y tengo unos 40, pero no me canso de ellos. Quiero tener más.
Morgan King's collection
Neil Esencialmente, estamos describiendo uno de los mayores retos de la sociedad actual y la mentalidad de muchos de nuestros clientes. El ejecutivo medio de cualquier empresa tiene como función velar por la seguridad. Nadie quiere verse abrumado por un torrente de preguntas tipo “¿por qué has hecho eso?”. Max Büsser diría que un adulto creativo es un niño que ha sobrevivido a la madurez. Creo que como sociedad, hemos perdido esa mentalidad joven y creativa. Nos han obligado a crecer, por una razón u otra. Creo que el hedonismo y la caballerosidad de los años 1960 y 1970 dieron alas a una libertad que era esencial para el diseño genial y ocurrente.
Repito: en mi empresa utilizamos la palabra “travesura” muy a menudo. Incluso para referirnos a la manera de comportarnos con los clientes: cuando estamos con una empresa farmacéutica de 1.000 millones de dólares, no hay ninguna razón por la que las reuniones sean un aburrimiento mientras se conspira sobre algo que se está diseñando. O sea, ¡estás en pleno proceso creativo! ¡Hay que disfrutarlo! Es algo que me apasiona. Con respecto a la industria relojera suiza, los retos que ha superado durante estos últimos años han generado un cierto miedo que puede cortocircuitar la creciente pasión de la gente y de las generaciones que suben. Quiero ver elementos divertidos, quiero que esa actitud pícara vuelva de nuevo a la industria relojera, porque eso abriría un fascinante capítulo en su historia.
Heuer Monaco 1133B "McQueen"
The Edge Hablando de las travesuras, la creatividad y de no dejar que nos invada el miedo: Neil, ¿qué ha hecho para meterse en líos con TAG?
Neil ¿Cuál de todas las veces? (Sujeta un reloj). Este nunca me ha dado problemas, porque solo hice uno. Quería un reloj de carreras auténtico, completo y ligero. Este tiene una caja 1163. Le hicimos un TC (tomografía computerizada), reconstruimos la esfera por completo, se procedió a hacer el biselado adecuado y se aplicó un acabado efecto “rayos de sol” al titanio. A primera vista no se nota, pero lleva una chapa de titanio 6.4 de palanquilla. Me lo hice para mí, así que no habrán denuncias. En cambio, este (saca otro reloj), sí.
Esto fue una gamberrada de proyecto que hice con Abel y Jean-Claude. Le dije a Jean-Claude que estaba coleccionando varios Viceroy antiguos en muy buen estado, pero que algunos de ellos necesitaban algunos mimos y que lo que quería hacer era restaurarlos, como se haría con un coche de carreras. Encontré cinco esferas y quería trabajar con un socio de F1 para revestirlo con DLC negro. Jean-Claude dijo: “¡Qué buena idea!”, así que seguimos adelante. Diseñé una correa rojo oscuro que para mí combinaba mejor con los relojes y los vendí de manera preventiva a mis amigos. Me lo pasé genial restaurando todas estas partes. Abel y yo tuvimos mucho trabajo intentando dejar las cajas perfectas.
Pero luego, metí la pata hasta el fondo con un estuche que habíamos revestido de cerámica roja: añadí el logotipo de Heuer en él. Debería habérmelo pensado dos veces: cada vez que lo pienso me da mucha rabia, porque de todo lo que hice, fue lo único que no era legal. Voy y grabo el logotipo de marras en el estuche. Esto desencadenó toda una retahíla de reprimendas del tipo “esto no se puede hacer”. Comprendíamos que no se pudiera hacer, pero el estuche fue un ocurrencia tardía. No podía creerme que hubiera metido la pata de esa manera. Así que decidimos pararlo todo de inmediato. Pero aún existen. Lo guay es que se los quedaron dos grandes coleccionistas que los lucen con orgullo travieso…
Heuer Monaco 74033N "Dark Lord"
The Edge Morgan, ha hablado de que los “dioses de los relojes” se enfadan si no lleva los relojes ni los saca a dar una vuelta. ¿Qué otra cosa ven con malos ojos los “dioses de los relojes” y con qué comportamiento suelen recompensar?
Morgan Como dice la expresión, “la suerte sonríe a los audaces”, así que lo que hay que hacer es atreverse con algo hasta que alguien te para los pies. Es casi como una frontera creativa. Muchos americanos adoptamos una actitud que alguna vez hace que nos metamos en líos, pero esto se debe a nuestra voluntad por probar, por hacer cosas nuevas. ¿Que algunas veces somos tozudos? Seguro que sí. Pero lo hacemos con toda la pasión, nos impulsa la pasión… He olvidado la pregunta. Ah, sí, lo de los “dioses de los relojes”.
Neil Tengo una pregunta añadida sobre los “dioses de los relojes”. ¿Dejan restaurar relojes o no?
Morgan El mejor reloj del mundo es el que llevas en la muñeca. Si lo restauras, si te gusta y vas a llevarlo, adelante. Mucha gente me ha dicho: “Este reloj no es del todo perfecto”. Sin embargo, la única vez que los relojes están en un estado impecable es cuando salen de la manufactura. A partir de ahí, siempre tendrán arañazos o algo más, porque se llevan en la muñeca. Se usan. Me encantan los juguetes y siempre tengo la sensación de que cuando no los miramos, se despiertan y van de un lado a otro, como en Toy Story. Si no llevamos el reloj, se pone triste.
The Edge Es una idea interesante. Cuando dice que cobran vida, ¿también imagina que los relojes tienen una cierta personalidad, como las personas?
Morgan Claro que sí. ¿Cuántas veces nos vestimos y decimos: “Voy a llevar este reloj”, pero cuando nos lo ponemos, no combina con los colores que llevamos ni encaja con nuestro estado de ánimo? A mí me gustan la variedad. Disfruto llevando varios colores. Los colores oscuros pueden ser muy elegantes o muy conservadores. Se trata de prestar constantemente atención a las emociones. Algunas veces, cojo algún reloj y se me acelera el corazón. Es como si viera esa pieza por primera vez, y pienso: “¡Qué bonita eres!”. Me lo pongo y pienso: “¿Dónde has estado? Te he echado de menos”. Y le doy cuerda. Es como una historia de amor.
Morgan King's collection - Heuer Autavia 1563 "Exotic"
The Edge Se ha referido al reloj en femenino. ¿Cree que los relojes tienen género? ¿Tiene relojes que parezcan ser más masculinos en la muñeca?
Morgan Para mí, son todos femeninos.
Neil Los míos son masculinos y femeninos.
Morgan ¿En serio? Interesante. Creo que son femeninos porque siento que son feroces pero indulgentes. Como mi mujer. Ella es la columna vertebral de la familia, pero que me deja hacer mis cosas. Me deja comprar juguetes. Tengo cosas de Batman y otras cosas así al azar por todas partes. Juego con piezas de Lego y no me dice nada. Eso sí, hay un límite que no hay que cruzar. Cuando me paso de ese límite, se acabó, duermo en el sofá. O fuera.
The Edge Neil, ¿cómo ve usted sus relojes?
Neil No los veo como si fueran personajes, pero siento algo muy íntimo por ellos. Los veo como objetos cargados de historias. Durante mucho tiempo tuve un Lange Zeitwerk, un reloj bastante complicado de llevar. Mide 14,16 mm de grosor. Para los lectores que no lo sepan, se trata de un reloj análogo de esfera digital. Los números se mueven a través de mecanismos sujetos en el interior. Se necesitaron varios años para desarrollarlo, al igual que un Urwerk, un MB&F o uno de los independientes.
Para mí, los relojes son portadores de historias. Si voy a un evento automovilístico, es posible que me ponga un reloj específico. Si voy a alguna reunión de trabajo, probablemente me pondré otro, para que me dé buena suerte. Esa es la historia que lleva cada uno. Tengo un GMT 1163 con una historia genial: se vendía por 80 dólares. Un hombre de una residencia de ancianos estaba vendiendo todas sus pertenencias. Se lo compré por 800, ya que no podía soportar la idea de comprárselo por 80: venía con el estuche y todo. El hombre se había comprado el reloj en una joyería de Nueva York y lo quería para hacer submarinismo.
Lo que me interesan son las historias y me encanta llevarlas conmigo: puede ser la historia de Abel renovando todas las superficies del reloj o puede ser la de una herencia que haya conseguido de un piloto de carreras. Son relojes con fondo. Como ingeniero y diseñador, me resulta sorprendente que se puedan encerrar tantos esfuerzos en un círculo de 42 mm. Es cierto que me refiero a algunos relojes en femenino y a otros en masculino., probablemente debido a los materiales o a la ejecución. Un reloj de titanio puede ser masculino, determinados relojes negros pueden ser masculinos, mientras que a un reloj con una pátina muy elegante o que presente líneas más delicadas quizás lo trate en femenino, porque quiero ser más cariñoso. Un Rolex Sub no sería femenino, para mí. Es tu amigo, tu compañero, tu colega.
Morgan No conoces a mi hermana.
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