DEPORTES TAG Heuer x Porsche: Hasta el límite

3min

Joanne Glasbey Editora de relojería para la revista Luxx de The Times y sus reportajes

Simona De Silvestro, la primera piloto femenina suiza de Porsche, es una apasionada de los relojes.

La suiza Simona De Silvestro tiene el trabajo de sus sueños. Desde edad temprana, descubrió su pasión por el automovilismo: “Mi padre tenía un concesionario de automóviles, le encantaban los coches de carreras y me compró un kart cuando tenía seis años”. De Silvestro ganó su primera carrera y nunca miró hacia atrás. Los fines de semana, sus padres viajaban por Europa para acompañarla a las carreras y, a los 16 años, entró en la Fórmula 4 y el universo de los coches de carreras y la velocidad.

Cuando llegó la oferta de apoyo financiero desde los EE. UU., aceptó la propuesta y se instaló allí durante ocho años para ganar experiencia, incluso en la serie IndyCar. Más tarde, después de competir en carreras de superdeportivos en Australia, se unió a Porsche. “Cuando son jóvenes, todos los pilotos de carreras sueñan con estar con un gran fabricante, por lo que competir con automóviles Porsche es muy especial para mí. La oportunidad es excepcional. Cada vez que se participa en una carrera con Porsche, existen muchas posibilidades de ganar”, dice De Silvestro. Además, “es una verdadera familia de competición: todos se cuidan unos a otros y te brindan la mejor posibilidad de tener éxito”.

Parte de su trabajo consiste en ser piloto de reserva del equipo TAG Heuer Porsche Formula E, y le apasiona participar en las primeras etapas del deporte en desarrollo. “Pruebo los coches, paso tiempo en el simulador, ayudo a mis compañeros a conseguir el mejor coche, el más rápido. Como piloto de reserva, siempre estoy dispuesta a participar”.

Simona De Silvestro para el equipo TAG Heuer Porsche Formula E

Según dice, la primera diferencia que se percibe en los coches eléctricos de carreras es la ausencia de ruido. “Escuchas sonidos que no se suelen oír, como el bloqueo de los neumáticos, que produce un chirrido que no había escuchado nunca. Entran en juego nuevas variables: la conducción debe ser más eficiente. En las carreras corrientes, se pisa a fondo la mayor parte del tiempo. En la Fórmula E, hay que estar constantemente pendiente de la gestión de la energía, por lo que requiere más estrategia. Es realmente desafiante, y una de las cosas que lo convierte en un espectáculo emocionante”.

Ser parte de la familia Porsche “tiene sus ventajas”, afirma, y su objetivo es el Taycan, “un coche eléctrico realmente excepcional”. En su muñeca, luce un práctico reloj TAG Heuer Connected. “Me estoy acostumbrando a todas las funciones, que son geniales para entrenar y jugar al golf, un gran pasatiempo”.

Por supuesto, para los pilotos de carreras, “el tiempo es todo”, explica. “En la pista de carreras, luchamos por el margen más ínfimo para ganar eficiencia en las curvas. Una décima de segundo puede marcar una diferencia de dos o tres posiciones”. Como piloto de carreras, eso es por lo que estás luchando”.

Y añade: “Soy suiza, soy puntual en todas las ocasiones”.

Joanne Glasbey Editora de relojería para la revista Luxx de The Times y sus reportajes