Relojes El icono más guay de las carreras: vuelve el TAG Heuer Monaco x Gulf

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Algunos relojes dan la hora. Otros definen el tiempo. Este año, TAG Heuer se convierte en el patrocinador principal del Formula 1 TAG Heuer Grand Prix de Monaco, y uno de sus relojes más emblemáticos vuelve a ser el protagonista: el TAG Heuer Monaco Chronograph x Gulf. Esta edición, limitada a 971 unidades, revive los colores, el espíritu y la arrogancia de la legendaria actuación de Steve McQueen en "Le Mans" en 1971.

DE VUELTA A 1971

En una película que redefinió el automovilismo en la pantalla, McQueen se metió en la piel de Michael Delaney llevando tres cosas: un traje de carreras con las rayas de Gulf, un Porsche 917K y un TAG Heuer Monaco en la muñeca. Su elección no fue aleatoria, sino personal. Guiado por la leyenda del automovilismo Jo Siffert, McQueen eligió él mismo el Heuer Monaco. Con su caja cuadrada, su corona en el lado izquierdo y su esfera azul, el reloj se convirtió en un símbolo perdurable de velocidad, rebeldía y frescura cinematográfica.

REVIVIENDO LOS COLORES DE UNA LEYENDA

Esta nueva edición trae de vuelta ese espíritu rugiente. La esfera plateada brillante está salpicada de las rayas azules y naranjas de Gulf, un guiño al coche de carreras y al traje que hicieron famoso al TAG Heuer Monaco. El logotipo de Gulf se encuentra justo debajo de las agujas, mientras que la insignia vintage de Heuer refuerza sus raíces en la historia de la relojería y el automovilismo. La icónica corona en el lado izquierdo, sello distintivo del Calibre 11, resalta su alma histórica.

DISEÑADO PARA COLECCIONISTAS, HECHO PARA EL MOMENTO

La caja de 39 mm, de titanio aremadp, ofrece un acabado en bruto, inspirado en los talleres, que resulta refinado y robusto a la vez. La correa de tela blanca está fabricada con Nomex®, el mismo material ignífugo que se utilizó en el rodaje de “Le Mans”, procedente del proveedor original, Hinchman. Una correa adicional de piel de becerro azul perforada ofrece una alternativa versátil. Ambas se presentan en una caja lacada inspirada en los colores distintivos de Gulf.

Lanzado en el año en que TAG Heuer presta oficialmente su nombre al Grand Prix de Mónaco, este reloj refleja con orgullo el pasado mientras corre con confianza hacia el presente. Más que un homenaje, es una máquina del tiempo, que retrocede directamente al momento en que el TAG Heuer Monaco se convirtió en leyenda.

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