CUENTOS Alerta spoiler: 50 años del Porsche 911 Carrera RS 2.7

Con los rugidos de su motor, los transeúntes giraban sus cabezas. Los ojos se abrían con sorpresa. Los oídos se agudizaban. La adrenalina se disparaba. Este fue el impacto directo del Porsche 911 Carrera RS 2.7 cuando se presentó por primera vez en el Salón del Automóvil de París en octubre de 1972. 50 años más tarde, la leyenda sigue viva en la mente de todos los amantes del automovilismo. Este modelo contaba con diversos apodos como “RS”, “2.7” o “cola de pato”. Se trataba del primer vehículo deportivo con un alerón delantero y otro trasero. Gracias a estos elementos, la estabilidad de conducción se veía reforzada, lo que permitió que los conductores alcanzaran velocidades más altas. Todo el mundo se preguntaba si el RS era legal en la carretera. Y la respuesta es sí: fue un vehículo diseñado para recorrer las calles y carreteras. Todo el mundo podía tener uno. Todo el mundo podía conducir uno. Era una época increíble.

La idea con la que se concibió el Porsche 911 Carrera RS 2.7 fue la de crear un vehículo homologado para la carretera que permitiera a los clientes participar en carreras. Este tipo de planteamiento también impulsó la introducción del Heuer Carrera. Este cronógrafo había sido diseñado para un cronometraje óptimo y contaba con una gran legibilidad en condiciones de alta velocidad. Sin embargo, no solo estaba destinado a los pilotos de carreras. También fue diseñado pensando en los entusiastas del automovilismo que querían vivir la vida a toda velocidad. Este año, el Porsche 911 Carrera RS 2.7 cumple 50 años. Y para celebrar este hito, TAG Heuer ha creado dos modelos de homenaje. Un homenaje a un vehículo y a un cronógrafo que cambiarían el mundo del automovilismo.

Nos adentramos en la década de los años setenta. Una época vibrante y embriagadora. Para representar estos años, la marca produjo una amplia gama de coches Porsche 911 Carrera 2.7 en 27 llamativos colores. Algunos de estos colores, como el icónico blanco Grand Prix White con combinaciones de tonos rojos y azules, sirvieron de inspiración para los relojes tributo TAG Heuer Carrera. Los colores que contrastan con la carrocería blanca del vehículo dan vida a algunas de las características más singulares del modelo. Las llantas de cinco radios, los logotipos Carrera y Porsche en los paneles de la carrocería y la famosa raya lisa en los laterales.

A primera vista, resulta sencillo ver cómo la estética bicolor del vehículo ha inspirado los relojes tributo de TAG Heuer. Ambos modelos reproducen el cronógrafo TAG Heuer Carrera de 42mm con una elegante disposición de tres subesferas y los contadores de cronógrafo para las horas y los minutos a las 3 y a las 9 horas. Estos relojes están equipados con el movimiento más avanzado de TAG Heuer: el movimiento de Manufactura Calibre Heuer 02. Este movimiento es visible a través del fondo de cristal de zafiro. Su masa oscilante ha sido modificada para plasmar el volante de Porsche y cuenta con los logotipos de ambas marcas uno junto al otro. Estos modelos estaban disponibles en rojo y azul. Es hora de echarles un vistazo.

Una caja de acero delicadamente pulida. Hecho. Índices chapados en rodio, así como las agujas de las horas y los minutos. Hecho. Estos pequeños detalles de la edición azul recuerdan al cromado de los tiradores de las puertas, los espejos y los marcos de las ventanillas. Cuenta con una esfera blanca opalina. Los dos subcontadores presentan un llamativo efecto acaracolado. Los códigos de diseño de Porsche han sido integrados en la totalidad del reloj. Fíjese en el cronógrafo lacado en azul, el segundero y el pulsador de las 2 horas. Observe el logotipo del escudo en la corona y los detalles azules en la masa oscilante del movimiento. El diseño del subcontador derecho recuerda a la estética de las llantas, mientras que la distintiva raya de color y el logotipo Carrera adornan la esfera, el lateral de la caja y la correa. Al igual que su musa, este reloj es un auténtico rayo de color.

Es como si el fuego y la furia de la “cola de pato” se hubieran utilizado para forjar la edición roja. Su refinada caja es de oro rosa de 18 quilates 5N, al igual que la corona, los pulsadores y el fondo de zafiro. La esfera blanca está enmarcada con una línea circular de color rojo chispeante e índices de color oro rosa. El color característico de Porsche también está presente con sutiles toques rojos en el cronógrafo, las agujas de los segundos y las marcas de los subcontadores. El calor aumenta con la lujosa correa de aligátor roja del reloj, acabada con una hebilla de oro rosa.

Estos dos relojes aspiran a provocar y sorprender como lo hacía el Porsche “cola de pato”. Aspiran a acelerar el pulso, a despertar la atención. Encarnan el espíritu del Carrera. No hay mejor manera de celebrar el 50 aniversario del Porsche 911 Carrera RS 2.7. Si desea obtener más información sobre estos relojes, visite nuestro sitio web.