DEPORTES Todo sobre la Fórmula E, Parte 2: La evolución de la revolución

Las coches de Fórmula E necesitan solo una cosa para funcionar: la electricidad. Están sentando las bases para el futuro de la movilidad y del automovilismo. Aunque la Fórmula E lleva a sus espaldas solo 7 temporadas, la tecnología que le proporciona la energía que necesita está en constante evolución y mejora. Cada generación ha ayudado a crear y mejorar la siguiente. He aquí cómo la tecnología en la Fórmula E ha evolucionado a lo largo del tiempo.

Todo comenzó con el Gen1 en la primera temporada de la Fórmula E; este coche fue el primero de su clase en todo el mundo del automovilismo. Se efectuaban cambios de coche a mitad a de la carrera, y se desarrollaron nuevos tipos de estrategias y tecnologías. Con el tiempo, el Gen1 sufrió una serie de cambios. En la temporada 2, se introdujeron nuevas reglas. Los fabricantes tenían a partir de entonces el poder de diseñar sus propios motores, inversores, caja de cambios y suspensión trasera. La potencia aumentó hasta los 170kW (233 CV). La siguiente temporada vio cómo el Gen1 adquiría un aspecto más fresco, con un alerón frontal más robusto para hacer frente al rigor de las carreras por las calles. Una extraordinaria mejora de la tecnología de las baterías proporcionó un 50 % de mejora en la eficiencia. Todos estos cambios se llevaron a cabo al mismo tiempo que el peso total mínimo del coche se redujo 8 kilos.

El Gen1 allanó el camino para el siguiente cambio radical en la tecnología de la Fórmula E. Hola, Gen2. Con mucha más potencia, este veloz coche presenta el doble de capacidad de almacenamiento de energía que el Gen1. Por lo que puede completar toda una carrera. Adiós, coche de mitad de carrera. Con 250 kW, el Gen2 acelera de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos. Además, puede alcanzar una velocidad máxima de 280 km/h (aproximadamente, 174 m/h). Todo esto solo significa una cosa: más velocidad y más acción. La Fórmula E también desarrolló mejoras de seguridad, introducidas en el nuevo coche con el dispositivo obligatorio Halo de la FIA. Asimismo, existe el “modo ataque”. Este aumento de potencia de riesgo/recompensa aporta una capa adicional de intriga a todas las carreras y a todas las estrategias de carrera.

El coche Gen3 lleva el deporte a otro nivel. No solo su rendimiento en pista es mejor, también se producirá de una manera más sostenible. Los creadores del coche deben exponer un análisis de ciclo de vida de su coche propuesto. Será todo un desafío el uso de materiales sostenibles, la vida útil de los consumibles, el reciclaje y los proyectos para una segunda vida de los componentes utilizados, por ejemplo. Nos aguarda un futuro más deslumbrante y más veloz.

La evolución de la tecnología en la Fórmula E ha sido rápida e intensa. Ha turboalimentado el proceso de la fabricación de coches eléctricos seguros y fáciles de manejar, sin comprometer la velocidad o la emoción del automovilismo. El máximo objetivo es ayudar a crear un futuro mejor, más limpio y más seguro para todos, tanto aquellos dentro de la pista como fuera.