Relojes Una historia de diseño: el TAG Heuer Carrera, capítulo dos

5 min

Angus Davies Cofundador de Escapement Magazine

Capítulo dos - Es hora de verlo más de cerca

Los índices

En las versiones anteriores del TAG Heuer Carrera de tres agujas, los índices parecían triángulos isósceles truncados, pero en los últimos modelos, los índices son mucho más complejos e incluyen una plétora de detalles sutiles. Vistos desde arriba, los índices parecen rectangulares; sin embargo, cuando se aprecian de lado, son escalonados, y abarcan tres planos diferentes. Asimismo, los índices se inclinan hacia abajo, con lo que se guía la mirada del usuario hacia el centro de la esfera.

Los índices evitan cualquier tratamiento luminiscente, algo poco habitual para un reloj deportivo. En su lugar, presentan un toque rectangular de SuperLumiNova® entre el índice y el realce, que otorga un maravilloso brillo en condiciones de poca luz.

Una ranura que disecciona la sección superior del índice acaricia las agujas de los minutos y los segundos a su paso, para aumentar la sensación general de precisión. El índice es solo ligeramente inferior a la parte superior del realce. Esta compleja disposición de diferentes alturas y las numerosas facetas del índice proporciona un sublime juego de luces.

Visto desde arriba, el diseño de los índices se asemeja mucho a los marcadores de las horas de los primeros modelos TAG Heuer Carrera, pero visto desde el lateral se aprecia un maravilloso juego de niveles y de luz.

La superficie de la esfera

El TAG Heuer Carrera Date de 39 mm y el Day Date de 41 mm presentan esferas acaracoladas o satinadas con efecto “rayos de sol” según el color de la esfera elegido.

En la generación anterior de TAG Heuer Carrera de tres agujas, la ventanilla se situaba a las 3 horas, sin embargo, con la llegada de esta última colección, se ha optado por trasladarla a las 6 horas, lo que ofrece un aspecto más equilibrado y simétrico. El único modelo que no adopta este cambio es el TAG Heuer Carrera Day Date 41 mm, que sigue mostrando sus ventanillas a las 3 horas. El borde plateado que enmarca la ventanilla se utiliza en todos los modelos. Ahora es más fino y no sobresale tanto de la superficie de la esfera. Luce más depurado y más sofisticado.

Cuando Jack Heuer concibió el diseño del Heuer Carrera inaugural de 1963, limitó la cantidad de texto en la esfera. De hecho, con cuatro palabras se decía todo: “Carrera”, “Heuer” y “Fabricado en Suiza”. El nuevo modelo cuenta con una nueva tipografía, menos texto y una nueva versión del logotipo de la marca. El diseño final se muestra despejado y con un aspecto maravillosamente puro.

Ahora, el bisel interior es más plano y ancho. Como me explicó Guy, la intención era que el reloj pareciera “más un instrumento, similar a un velocímetro”.

TAG Heuer Carrera (WBN2112.BA0639)

Nuevas agujas

Guy Bove también destacó las agujas de horas y minutos equipadas en el último TAG Carrera de tres agujas. Las agujas tipo testigo del modelo anterior se han sustituido por elementos similares a los vistos por primera vez en el Heuer Monaco de 1969, aunque las nuevas agujas rompen con el color en favor de una paleta monocromática.

La punta bien definida de cada aguja, junto con la línea central que atraviesa las agujas, señala los minutos y los índices con una precisión similar a la de un láser, lo que refuerza la percepción de un cronometraje preciso.

El objetivo del equipo de diseño de productos era perpetuar la larga reputación de legibilidad del modelo, y las agujas más modernas desempeñan con éxito su función.

TAG Heuer Carrera (WBN2013.BA0640)

El bisel y las asas

El bisel se sitúa más alto que antes e incorpora más facetas. El cristal de zafiro adyacente está ligeramente curvado y presenta un borde biselado. Estas pequeñas modificaciones dan lugar a una combinación de bisel y cristal de zafiro que parece más sofisticada, pero el conjunto se sigue manteniendo notablemente despejado.

Desde su origen, el TAG Heuer Carrera siempre ha tenido unas asas “recortadas” muy características. La sección interior de las asas, situada junto a la correa, se inclina hacia el interior interactuando con la luz de forma diferente a otras superficies cercanas. Una vez más, este modelo juega de forma extraordinaria con la relación entre las superficies y las fuentes de luz cercanas.

En el nuevo TAG Heuer Carrera de tres agujas, las puntas de las asas se han renovado para incorporar un perfil más intrincado y suavemente inclinado. Además, las asas ya no terminan al llegar al bisel, sino que fluyen hacia la sección principal de la caja y luego lo circunvalan. El perfil final presenta dos delgadas líneas de acero inoxidable que sobresalen a cada lado de la caja, lo que proporciona un contorno más orgánico y fluido.

Al hacer las asas más cortas, el brazalete está más integrado y, como resultado, se flexiona más fácilmente alrededor de la muñeca del portador, lo que mejora su comodidad.

La superficie superior e inferior del asa está muy pulida, mientras que los lados verticales de la caja están satinados. Esta combinación de tratamientos superficiales es más costosa de ejecutar, pero confiere a la caja un aspecto y un tacto de lujo.

TAG Heuer Carrera (WBN2111.BA0639)

Un nuevo brazalete

El brazalete de acero equipado en el TAG Heuer Carrera de tres agujas es más liso que nunca. El brazalete presenta un acabado satinado en la mayoría de los eslabones; sin embargo, si se observa con más detalle los eslabones satinados centrales se puede constatar que tienen bordes facetados pulidos, un acabado que también se repite en los bordes del brazalete.

Al conversar con Guy Bove, director creativo de diseño de producto, este reveló que el brazalete en forma de H es muy similar al brazalete introducido en los modelos de cronógrafo TAG Heuer Carrera del año pasado. Los eslabones se han fabricado deliberadamente más finos y con un diseño que se adapta a la curva natural de la muñeca, con objeto de mejorar la comodidad del portador.

Observaciones finales

Los propietarios de la versión anterior del TAG Heuer Carrera de tres agujas pueden estar seguros de que poseen un reloj fabuloso. Además, el evidente parecido entre este modelo y sus antecesores mitiga cualquier indicio de obsolescencia.

Aun así, nunca se ha podido acusar a TAG Heuer de complacencia o, como ya se ha dicho, de dormirse en los laureles. Desde que Edouard Heuer fundó la Maison en 1860, no ha cesado en su continua búsqueda de mejoras. De hecho, nunca ha dejado de innovar y siempre ha buscado firmemente ofrecer productos caracterizados por sus avances y su desarrollo.

Vistos de forma aislada, es posible que algunos de los cambios aplicados a este nuevo reloj parezcan muy pequeños, lo que quizá lleve a algunos observadores a preguntarse si ha merecido la pena. Sin embargo, una observación más minuciosa del reloj revela con nitidez la sabiduría detrás de tales cambios. Guy Bove y su equipo no cejan en su empeño de hacer que los grandes relojes sean aún mejores, un empeño que se reivindica con este último modelo.

Hay un último aspecto que cabría mencionar. Para todos los admiradores de Jack Heuer y su cronógrafo pionero de 1963, las cuatro versiones del nuevo TAG Heuer Carrera mantienen su creencia en el “diseño claro y limpio”.

Angus Davies Cofundador de Escapement Magazine