CUENTOS EXPERTOS EN TIEMPO: Tommy Fleetwood, golfista profesional

Dos meses después del podcast de The Edge en que charlábamos con él sobre la inspiración, la familia, el trabajo duro y sobre qué se siente al caminar un kilómetro y medio con zapatos de golf, nos encontramos de nuevo con el golfista profesional Tommy Fleetwood antes del Campeonato PGA de 2021 para hablar sobre su primer hoyo en uno, sus campos favoritos y sobre cómo ayudó a su padre a configurar la aplicación TAG Heuer Golf.  

Nos encontramos en Carolina del Sur con ocasión del Campeonato PGA de 2021, que tiene lugar en The Ocean Course, en Kiawah Island. Este es su segundo mayor torneo del año. ¿Cada vez que pisa el campo de uno de los campeonatos mayores le resulta igual de emocionante?

Todos son especiales. Cada vez que se pisa un campo por primera vez, puede resultar intimidador. Cuando no se conoce bien el campo, siempre se está muy alejado de cada tee, lo que hace que los hoyos sean largos y duros. Este torneo es apasionante porque es el primero con público que hemos tenido en mucho tiempo. Parece que estamos volviendo a aquello a lo que estábamos acostumbrados, lo cual es emocionante.

¿Le gusta tener público o ha disfrutado de este periodo de calma en cierto modo? 

Es indudable que no tener a nadie observando ha sido una experiencia distinta. En mi último PGA, empecé a jugar muy tarde un sábado; cuando alcancé el hoyo 17 eran las 7 de la tarde y ya no quedaba literalmente nadie en el campo. Daba un poco de miedo. Así que es muy emocionante que todo vuelva de una manera u otra a la normalidad. Creo que todo el mundo está deseándolo.

¿Cómo se prepara antes de participar en un torneo mayor? 

Me gusta jugar un torneo dos semanas antes y después tener una semana para practicar y perfeccionar el juego, y también para descansar mucho. Una semana de juego, una semana libre y, luego, me voy al torneo mayor.

¿Y cómo se prepara para el campo? 

Uno puede pasar todo el tiempo del mundo en el range, pero cuando se juega de verdad, hay que enfrentarse a vientos distintos con ángulos diferentes. Por eso, lo mejor para mí es tener el Connected Watch y ver exactamente a qué distancia golpeo el driver desde el tee, qué distancia se alcanza con los hierros y consultar patrones de tiro. Para un profesional, disponer de estos datos es crucial.

¿Es una ventaja poder tener vistas aéreas en el Connected Watch?

Claro. Es muy importante y además da mucha seguridad. Cuanta más información e imágenes se tiene a disposición, más fácil es absorberlas y realizar un tiro. Se puede practicar duro, pero también hay que sentirse cómodo y tener la seguridad de disponer de la cantidad adecuada de datos.

Sus estadísticas de golpes con wedge son impresionantes. ¿Cómo consigue controlar los golpes con wedge? (Los wedges son un tipo de palo de hierro de mango corto y cabeza pesada que se utiliza para los golpes de poca distancia o para salir de lugares difíciles).

Es una buena pregunta porque durante un tiempo no se me daban muy bien. Creo que últimamente he mejorado. Solía llevar cuatro wedges porque cuando empecé a jugar como profesional no era muy bueno. Así que mi primer consejo a alguien que solo tiene tres wedges sería hacerse con otro más. Cuanto más acentuado es el swing al golpear con un wedge, más gira y menos control se tiene sobre él. En los golpes con wedge, me gusta abrir mucho la postura para ganar margen de maniobra. Así que, independientemente de la distancia y de qué palo crea que es el adecuado, no dudaría en aconsejarle a un jugador que cogiera un wedge y que intentara abrir la postura.

¿Qué se le pasa por la cabeza cuando da un golpe de approach (de 100 yardas como mínimo desde el hoyo) cuando debe tener en cuenta tantos factores distintos?

En un torneo mayor, hay puntos verdaderamente difíciles. En el campo de esta semana (el Ocean Course de Kiawah), es posible que haya lugares en los que pensamos: “si estoy fuera de posición, el bogey (el resultado que se consigue al jugar un hoyo en un golpe más de su par) será la peor puntuación que obtenga; no voy a hacer un doble bogey ni un triple bogey”. Esta es una de las diferencias entre un torneo mayor y una semana normal. No es fácil imaginarnos preguntándonos desde qué lugar podemos evitar hacer un doble bogey. Sin embargo, esto pasa. Me gustaría ser lo suficientemente bueno como para hacer siempre el putt perfecto, pero no lo soy y tengo que aceptarlo. Me encantaría estar siempre pateando.

¿Le importaría que hablásemos de su ace en el Masters Tournament en el hoyo 16? Fue increíble.

Sí, hay lugares fantásticos en los que conseguir un hoyo en uno, y el hoyo 16 del Masters es uno de ellos. Fue un momento increíble, porque ese día, no conseguía embocar la bola con un putt, pero de pronto, conseguí el hoyo en uno. Y eso que estaba jugando con Phil Mickelson, que es una leyenda en Augusta. Cada vez que se hace un eagle o un ace en Augusta, se gana el cristal: ese era mi 5.º Masters, pero solo mi primer trofeo, así que estaba muy contento.

No hay mucha gente que pueda decir que ha jugado en el Augusta National, pero si a eso le añadimos hacer un ace, es el no va más. ¿Cuántos ha hecho en total? 

(Duda).

Eso significa que ya son muchos. 

Creo que hasta ahora han sido ocho o nueve. Alguien me hizo la misma pregunta hace poco, porque conseguí otro hace una semana antes del Masters. Pero desde entonces, estoy pasando por un período de sequía.

¿Recuerda dónde consiguió el primero? 

Fue en el hoyo 16 en un campo en el que jugaba con mi padre. Lo recuerdo bien. Probablemente es mi ace preferido.

¿Cómo era ese campo? 

Crecí en una ciudad de la costa que contaba con campos tipo links increíbles y era miembro del único campo tipo parkland de allí. Me encantaba jugar con mi padre y otros jugadores júnior. Era un campo que me parecía muy largo. Ahora no me lo parece.

Se estaba preparando para esta semana.

(Risas) Era un poco más corto que Kiawah. Pero sí, había mucha agua en el campo. Era un campo tipo parkland en una ciudad de campos tipo links, pero era estupendo. Todavía voy allí.

¿Es muy distinto jugar en Estados Unidos en comparación con el lugar donde creció en Inglaterra? 

Estoy convencido de que, tanto si se trata del tour europeo como del PGA, en Estados Unidos y Reino Unido hay distintos estilos de golf. Creo que, al fin y al cabo, si se juega bien, se puede estar tranquilo, aunque existen distintos estilos y aspectos que tener en cuenta. Diría que en Estados Unidos, se necesita conseguir un vuelo más elevado de la bola. Pero a fin de cuentas, el golf se trata de eso.

¿Hay que hacer otros ajustes además de cambiar los estilos de golf al venir a Estados Unidos? 

Aquí es indudable que el público aficionado de los torneos es de otro tipo. Siempre he tenido mucha suerte y he disfrutado de un gran apoyo. La gente se ha portado siempre muy bien conmigo y me encanta el entusiasmo que me demuestran los fans aquí. Son más escandalosos, en el buen sentido.

¿En qué momento se dio cuenta de que podría convertirse en un jugador profesional y decidió dedicarse al golf? 

Era mi actividad favorita cuando era niño: al volver de la escuela, me iba directamente a golpear la bola. Empecé a jugar en el equipo nacional de Inglaterra, así que pasé tiempo codeándome con la élite del golf y no dejaba de mejorar. Cuando dejé la escuela, dediqué unos cuantos años a jugar al golf a tiempo completo. Al llegar a los 18, participé en la Walker Cup. Fue entonces cuando supe que me iba a convertir en jugador profesional. A esa edad, se tiene plena confianza en uno mismo. Cuando salí finalmente del tour europeo, fue muy duro: los estándares son mucho más rigurosos de aquellos a los que estaba acostumbrado y hay que esforzarse mucho más. Así que cuando tenía 15 o 16 años, ya estaba bastante focalizado en convertirme en golfista profesional y en dar la vuelta al mundo como tal.

¡Y aquí estamos! He visto muchas entrevistas en que habla sobre el campo de St. Andrews…

(Risas) Con mucha pasión, ¿verdad?

¡Sí! Es evidente que le encanta. Háblenos de su primera ronda allí.

Hay un evento para los aficionados al golf en Europa llamado el St. Andrews Links Trophy. Esa fue la primera vez. Para empezar, en la ciudad hay un ambiente alucinante. Es una ciudad rendida al golf. En cuanto al campo en sí, me encantan los lugares en que se ponen a prueba todos los aspectos del juego. En ese tipo de campo, pueden ocurrir muchas cosas distintas. Los greens son descomunales, cada día es diferente del resto dependiendo del viento. Es un campo en el que lo mejor es no perder nunca la pelota, aunque al mismo tiempo, se pueden encontrar algunos bunkers y pasarlo realmente mal.

Hemos estado allí. Si se mira a la casa club desde el punto más alejado, parece que la distancia es muy larga. 

Efectivamente.

Y si es un día lluvioso y frío, ¿también disfruta cada segundo del juego?

Sí, muchísimo.

¿Cuál es su “joya oculta” en cuanto a campos de golf se refiere que no sean de ningún tour? 

Me encanta Shinnecock, donde se celebró el Open de Estados Unidos en 2018. Y por la zona de The Hamptons, he jugado en varios campos. Me encanta el National y el Friar’s Head. El National, creo, es uno de esos campos en los que nunca pierdes la pelota, así que siempre estás jugando. Y luego, cuando entras en los greens, ¡hay tantos golpes distintos que se pueden hacer! Me lo paso verdaderamente bien.

¿Ha regalado un TAG Heuer alguna vez?

Sí, a dos entrenadores, porque quería que tuvieran uno. Y a mi padre, tenía que regalarle el Connected Golf. Fue muy gracioso porque cuando se lo regalé, me preguntó si era fácil de configurar y respondí que sí. Pero al final, no pudo configurarlo. Le tuve que ayudar a configurar la aplicación TAG Golf y cuando la abrió por primera vez, apareció un anuncio con una foto mía. Y mi padre me dijo: ¿y esto qué es? No le gusta mucho halagarme, es bastante sarcástico. Sin embargo, aún piensa que puede golpear un hierro 7 a 180 metros, así que… (Es impresionante…).

Quizás tenga un disgusto.

¡Seguro que sí, ahora que tiene el reloj!

¿Tiene alguna rutina de calentamiento antes de jugar una ronda? 

Depende. Yo pienso que un calentamiento no es más que eso: algunas de mis mejores rondas siguieron a calentamientos en los que no pude golpear la pelota en el range, y en cambio, he jugado rondas pésimas tras golpear de maravilla en el range. También tengo una rutina de estiramientos que puede variar. Tengo un entrenador, y en función del aspecto del swing que vayamos a trabajar, me aconseja estiramientos distintos. Pueden variar entre los 5 y los 20 minutos. Después de eso, simplemente me dedico a patear, chipear o golpear las bolas. Intento no forzar las cosas ni a estructurarlo todo demasiado.

Ahora tengo varias preguntas rápidas. ¿Cuál es el foursome de sus sueños?

Mi padre y mis hijos.

¡Qué rápido ha respondido!  ¿Qué torneo mayor sería más significativo para usted?

El Open.

¿Cuál es su formato de Ryder Cup favorito?

¿El foursome, el fourball o el individual? El formato foursome.

¿Qué atleta de TAG Heuer elegiría para que le enseñara su deporte? 

Sin dudarlo, Naomi Osaka. Es muy buena ganando grand slams.

Intentaremos organizar un partido. Esta pregunta puede ser más difícil: ¿Augusta o St. Andrews?

St. Andrews. Es muy fácil.

¿Cuál es la función del reloj TAG Heuer Connected que más le gusta?

Indudablemente, el cálculo preciso de distancias tan solo presionando un botón.

¿Qué espera con más ganas esta semana?

Jugar, obviamente. Como he dicho, me gustan los campos que ponen a prueba cada aspecto del juego, desde el mental hasta los que presentan cualquier reto técnico. Siempre me emociona poder superarme de esa manera. Y estoy deseando disfrutar del ambiente.

Para aquellos que verán el campeonato PGA desde casa, ¿a qué les recomendaría que prestaran atención? 

Imagino que habrá algunas pesadillas, pues siempre se puede terminar en algún punto difícil. Si la competición está muy reñida desde el principio, disfrutaremos de un golf de primera. Como debe ocurrir en un torneo mayor.